Según un estudio reciente, se comprobó que hay una relación entre el consumo de vitamina D y el COVID-19. La investigación refleja que la vitamina reduce el riesgo de infecciones virales del tracto respiratorio y que, por lo tanto, a mayor consumo, menor será la posibilidad de contagio.
Esta vitamina es reconocida como un importante factor coadyuvante en varios procesos físicos relacionados con el metabolismo de los huesos y el calcio, como en varias enfermedades, dolencias autoinmunes, cardiovasculares, diabetes tipo 2, obesidad y entre otras.
Otra de sus virtudes es que tiene efectos antivirales que se producen de manera directa e indirecta. En ese sentido, su carencia puede incrementar la probabilidad de infección por algunos virus, por ejemplo, el retrovirus, la hepatitis y el dengue.
¿Cómo adquirir vitamina D?
Se sabe que la gran fuente es la exposición al sol, al menos unos minutos y con los recaudos necesarios para no dañar la piel. Sin embargo, hay otras formas de conseguirla que van desde la alimentación, hasta los suplementos.
Desde la Cámara de Empresas de Internación Domiciliaria de la Provincia de Buenos Aires (CAMEID) creemos que contar con información es la mejor herramienta para prevenir enfermedades y tener una vida más saludable. Por eso, queremos compartir estos consejos que ayudarán a incrementar el consumo de vitamina D.
Principalmente, se puede obtener a partir de de alimentos fortificados como la leche, los cereales, el jugo de naranja, productos lácteos, bebidas de soja, entre otras, y en pescados como el salmón, el bacalao o las sardinas.
Una dieta que incorpore estos elementos y unos minutos de exposición al sol pueden ser muy beneficiosos. Sin embargo, es fundamental realizarnos controles médicos y evaluar, en caso de que haya deficiencia de esta vitamina, cuál es la forma óptima de obtenerla y si es necesario consumir algún tipo de suplemento.
Más allá de la relación entre vitamina D y COVID-19, debemos recordar que para evitar los contagios también es fundamental lavarnos frecuentemente las manos con agua y jabón o utilizar alcohol en gel, evitar tocarse el rostro y, sobre todo, mantener lo más posible el aislamiento y distanciamientos social.