Las enfermedades cardíacas son una de las primeras causas de muerte a nivel mundial. Sin ir más lejos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que hay más decesos por este tipo de patologías que por cualquier otra causa. Entre estas enfermedades, una de las más frecuentes es el infarto al miocardio, que se produce por la obstrucción de las arterias.

La detección precoz es fundamental y es lo que puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Para eso, es necesario conocer y estar atento a las señales que el cuerpo envía antes de sufrir un ataque.

¿Cuáles son las señales de alerta?

Presión en el pecho: se puede manifestar tanto como una presión o como un dolor agudo. En ese sentido, si se detecta que este malestar se esparce por el cuerpo, sobre todo por los brazos y los hombros, es importante solicitar un servicio de emergencias médicas.

Fatiga: otra señal de que se puede estar por sufrir un infarto es cuando la persona se despierta cansada y sin energías, lo que le hace difícil llevar adelante sus actividades cotidianas. Esto tiene que ver con que el excesivo cansancio puede ser un alerta de que el corazón trabaja más para bombear sangre.

Disnea, falta de aliento o dificultades para respirar: esto se debe a que pulmones y corazón trabajan en forma conjunta y el estrechamiento de las arterias genera un bloqueo del flujo sanguíneo normal. Esto, en consecuencia, provoca que los pulmones no obtengan suficiente sangre y la persona se sofoque.

Sudor frío: entre los síntomas que los pacientes señalan como más frecuentes, la sudoración fría y húmeda figura entre las primeras. Esto se produce porque el corazón no recibe la cantidad necesaria de sangre oxigenada, por lo tanto, el cerebro advierte la falta de oxígeno y hay una falla en la circulación sanguínea.

Indigestión, náuseas y vómitos: en algunos casos, los infartos de miocardio son precedidos por problemas digestivos, que pueden ser náuseas y vómitos, entre otros. Pocas veces los pacientes asocian esta señales con alertas de ataques, por lo que es difícil anticiparse.

Desde la Cámara de Empresas de Internación Domiciliaria de la Provincia de Buenos Aires (CAMEID) entendemos que la prevención es la mejor forma de tener una buena calidad de vida. En ese sentido, resaltamos la importancia de mantener hábitos saludable y lo fundamental de realizar una visita al médico al menos una vez por año.